Enférmame de fe

Enférmame de fe

Autor: Samuel Hernández Rivas

(Samirivas)

Señor, cuando a tu casa voy con alegría,
Con mi carga de penas y problemas,
Me pregunto por qué el hermano que me mira
De mi se burla, se ríe y me condena.

Si uno toma la senda equivocada
Al encuentro de placeres y de vicios,
Duele mucho cuando acusa la mirada
Del hermano que nos manda al precipicio.

Si yo tomo el camino que es correcto,
Ansiando conocerte y buscando tu perdón
Siempre encuentran en mi vida algún defecto,
Porque no profeso su misma religión.

Si a querernos todos como hermanos,
Vino a enseñarnos tu hijo aquí en la tierra,
Yo no entiendo porque si son cristianos,
En lugar de ayudarnos, nos hacen guerra.

Es por eso señor que yo te imploro,
Acudiendo a tu poder y a tu grandeza,
Me procures una vida con decoro,
Y me des ante todo esto, entereza.

Porque amigos y hermanos yo atesoro,
Y enseñanzas busco siempre en tu palabra
Eres grande señor y yo te imploro,
Para que mi alma por siempre a ti se abra.

Por todo el mundo se reúnen en tu nombre,
Religiones, sectas o “denominaciones”
Muchas alteran la conducta del hombre
Y cometen en tu nombre aberraciones.

¿Nunca podremos unirnos como hermanos
Con un mundo de paz y no de perversión?
Capaces somos a veces de matarnos,
Por defender nuestra propia religión.

Entre ustedes que no haya divisiones,
Dijo pablo claramente a los corintios,
No pongan discordia entre sus corazones,
No dividan la fe, pues es un solo cristo.

Ninguna religión la perfección posee,
Ni tiene la llave, ni la verdad absoluta
Solo es feliz quien vive lo que cree
Lo goza, lo comparte, lo vive y lo disfruta.

No permitas señor que yo claudique,
Cuando busque entender a tu palabra,
Mejor envía a tu espíritu y me explique,
Cuando la Biblia ante mis ojos siempre abra.

Mientras tenga en la vida, el uso de razón,
En mi lucha por ti yo siempre seguiré,
No me enfermes señor de religión,
Mejor te pido, ¡enférmame de fe!